martes, 23 de diciembre de 2014

¿ Y DESPUÉS ?



















Abro el arcón de las debilidades,
buceo en sus entrañas en busca
de un sendero que no nos traicione.

Ha nevado tristeza en la almohada
que pende de oráculos dormidos.
¡Hay tanta sed en las arterias
del día oscurecido por savia inmóvil!
¡ Tanto abandono en aleros insomnes!
¡ Tanta elegía con rumbo exacto!

Miro a los niños, sus barcos de papel
navegando estrellas, sonriendo
como si la existencia fuera columpio
y el viaje no acabara en los ojos.
Y abrazo cada uno de sus paraísos,
lo mismo que se abraza vida encantada.

Doy vueltas sobre mí misma
intentando llegar al génesis puro.
Deletreo momentos indivisibles
ataviados con telas que cubren
regalos de sencilla apariencia.

Creo sin creer, en todas las estaciones
por las que pasa un tren
que nunca se detiene, y espero,
espero en el levante encarcelado.