miércoles, 3 de junio de 2015

ELLOS

















Se clavan la luz,
anulan colores
para ubicarse en lo negro,
refugio sin vistas
tras un muro de ácaros.

Olvidan sus pies descalzos
en cada huella petrificada,
envuelta con murmullos
de ceniza.

Perdidas sus coordenadas,
hacen amagos
de crisis devoradoras,
niegan y se niegan en brotes  
de rimas consonantes.

Ellos, días
atrapados en su ruina ,
no saben
que en un papel mojado
se puede leer un poema
tan bello
como la caída de las hojas
en otoño.




2 comentarios:

  1. Estremecedor poema, amiga. Me gusta sobre todo la última estrofa. Un placer leerte.

    Felicidades y besos. María

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  2. Muy agradecida siempre, María. Besos, amiga.

    Pilar

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