domingo, 16 de noviembre de 2014

DESPERTAR

























DESPERTAR


Otro despertar
y el futuro se cristaliza
entre deshilados ensambles.

Los brazos del amor soportan
nubes que oprimen
y brebajes que inoculan
un hálito de milagroso presente.

Descalza deambulo
por cuevas que interiorizo,
poniéndole sonrisas
tan ajenas como teatrales.

Me hago pasar por sanadora
de lágrimas reprimidas;
cuento los días hacia el pasado
sin que nos falte una rosa,
o un latido nos proteja.

Mentiras piadosas
brotan de mis hombros pálidos,
mientras limo aristas
y me acojo a señales de humo
en el laberinto de mis súplicas.

Todo, porque brote de la pena
una sonrisa.








2 comentarios:

  1. "Sin que nos falte una rosa
    o un latido nos proteja" Precioso, amiga poeta. Nunca debemos permitir que nos falten las rosas.

    Un abrazo y mi admiración. María

    ResponderEliminar
  2. Mi gratitud inmensa con mi abrazo enorme, querida María.

    Un honor siempre recibir tu visita.

    Pilar

    ResponderEliminar